¿Buscas un estilo rejuvenecedor? Prueba con el Bixie

Si el corte pixie y el bob tuvieran un hijo, sería el bixie. Es la mezcla perfecta entre ambos, el punto intermedio que es más largo que el primero, pero no llega a ser tan largo como el segundo. Esta característica lo vuelve muy fácil de llevar, pues reúne los beneficios de ambos mundos y lo mejor, refresca muchísimo. De ahí que sea una excelente opción para los 40, 50 y más.


Cuando vas a aventurarte con un cambio de look es importante considerar algunos aspectos: tu estilo de vida, el tiempo con que cuentas y la mantención que estás dispuesta a hacer. Yo no tengo mucha paciencia, por lo tanto, siempre busco opciones prácticas que me resuelvan la vida.

En ese sentido, el corte bixie es ideal. Su largo no solo es funcional, sino también versátil. Lo puedes usar con o sin chasquilla, con o sin capas, recto o desflecado. Se acomoda muy bien a todos los tipos de rostro, así como a melenas lisas, rizadas u onduladas.

Mantención mediana y fácil de peinar

A diferencia de un corte de pelo pixie, la mantención del bixie es más relajada. Puedes retocar el largo cada dos meses sin perder la forma. Además, no requiere de mucho esfuerzo para peinarlo y permite bastantes opciones de styling si prefieres algo más trabajado o de ocasión, como un estilo wet hair, ondas sueltas, incorporando accesorios o jugando con texturas (extra liso, con ondas suaves, etc.)

Pasados los 40 y 50, el pelo bixie resulta sumamente favorecedor porque muestra el cuello, estilizándolo. A su vez, eleva visualmente los pómulos y refrescan el rostro. Es informal y con personalidad, logrando un efecto de mujer con estilo. En mi opinión es un corte muy fashion, es ese típico look como ‘sin esfuerzo’ de una tipa segura que se levantó, se duchó, se maquilló un poco y se fue… a mí me encanta.

El único contra es que mucho no lo puedes tomar, aguanta quizás un medio moño, pero nada más. Si eres muy inquieta con los peinados, debes tener en cuenta esto. Todo lo demás es un hit. Además, resulta cómodo en invierno (se seca rápido, se luce con sweaters de cuello alto, pañuelos y bufandas) y en verano (se luce el cuello y el pecho, despeja la cara, es fresco y sensual al dejar más piel a la vista) ¿Necesitas más para convencerte?