¿Tonalizar o matizar? Cuándo y por qué

Tonalizar o matizar es lo mismo, pero es distinto a la tintura. Te enredé, ¿o no? Como buena autodidacta y otrora fan del rubio, tuve que aprender rápidamente las artes del tonalizante para salir del pelo amarillo o peor aún, anaranjado. Un clásico cuando eres rubia natural (y una de las razones por las que quise volver a ser castaña, después de tantos años batallando con la oxidación). Pero, no nos desviemos.

Un tonalizador es un pigmento puro (azules, violetas, grises, rojos, etc.). Es intenso y se utiliza para potenciar un color, aportar algún efecto de luz o para corregir/neutralizar un tono indeseado. Por ejemplo, los violetas neutralizan el amarillo, los azules los tonos naranjas y los grises o platinados un poco de ambos; por eso existen los champús y tratamientos con esos pigmentos para las rubias (y las canas).

Generalmente, los matizadores se mezclan con el tinte o baño de color, para devolver los pigmentos que se han eliminado al decolorar de castaños a rubio, por ejemplo. Pero también se utilizan en los casos inversos, cuando se quiere oscurecer. Si el cabello está muy decolorado, será necesario aplicar el pigmento puro primero, para que la hebra capilar pueda absorber y retener más tiempo el color que se aplique luego.

Recientemente utilicé matizantes cuando me oscurecí un poco el pelo y luego de dos meses, lo fui a retocar porque se había aclarado y oxidado bastante. Si bien no vuelves al punto cero, cuando tienes el pelo rubio y lo oscureces, se pierde muy rápido. Además, se había puesto un poco amarillento y a mí me gustan los castaños más fríos. Mi objetivo es que los reflejos se vean en la línea de los dorados, pero no naranjas. Por eso el colorista es CLAVE para saber qué hacer, por lo general se combinan varios matizantes y el profesional debe considera tu tono base y los procesos de coloración que llevas encima para pronosticar la evolución del color y poder decidir la mejor mezcla para ti.

“Solo las rubias deben matizar su cabello” ¡MITO!

Si bien las rubias necesitarán mayor mantención del color, sobre todo cuando la base natural es más oscura; los cabellos castaños (si están tinturados) también requerirán de un matizado, quizás con menor frecuencia, porque la oxidación será menor. Debes saber que todo cabello tinturado va perdiendo pigmento con el pasar del tiempo y para mantener el color ‘rico’, intenso y brillante, será necesario un retoque al menos cada 3-4 meses.

Si quieres tener el pelo rojo o anaranjado, considera que necesita de tanta o incluso más mantención que un rubio, pues los naranjas se deslavan con mucha facilidad, es un pigmento que se pierde rápido, entonces además de retocar el color mensualmente, será necesario incluir un poco de rojo en la mezcla si quieres lograr más fijación.

Para mí, los matizantes hacen una GRAN diferencia. Basta con ver las fotos del antes y después de mi pelo, logré recuperar un reflejo más natural y sacar el amarillo que se estaba apoderando de mis rulos.


Cuidados complementarios para la casa y la pelu

Si da el presupuesto y el tiempo, recomiendo incluir un tratamiento nutritivo o de protección de color al momento de teñir y matizar el cabello. Probé la línea Luxviva de Medavita y me ENCANTÓ. Consta de un champú, un tratamiento y un spray de protección. Me dejó el pelo suave, hidratado y su función es ‘sellar’ el color, por eso se recomienda utilizarlo inmediatamente después de la aplicación de color.

Complementar las idas a la peluquería con productos en casa que te ayuden a alargar las mantenciones. Por ejemplo, prefiere productos orientados a la protección del color (yo uso el spray de protección y prevención Color Complete de Moroccanoil y la crema para peinar de Medavita que aporta protección a los rayos UV). Para apoyar el color propiamente tal, puedes sumar champús y/o tratamientos semanales que incluyan pigmentos (los hay violeta, azules, rojizos y castaños).